20101229

Edward - Parte 1

Edward se levantó de la cama y miró alrededor. Todo estaba oscuro salvo por un tenue haz de luz. Dicha luz salia de su móvil, y este emitía un molesto sonido que hacía las veces de despertador. Lo apagó y encendió la luz de su cuarto. Notó el intenso frío de las mañanas de enero.
Sin dudarlo se vistió y fue corriendo a la cocina para beber una taza de leche caliente. A sus diecisiete años Edward no había hecho otra cosa que asistir religiosamente al instituto, hacer los deberes a diario y estudiar lo justo apra sacar un siete. No era mal chico, intentaba hacer lo que debía como mejor sabía. Aunque era de moral dudosa. De niño jamás sintio pudor hacía los insectos y los mataba de infinitas maneras, cada vez que veía el cadáver de un animal pequeño como una rata , una paloma o un gato lo recogía y se lo llevaba para satisfacer su curiosidad. Nunca ha tenido hermanos y no sabe que es compratir.
Aquel día parecía ser uno mas, un tedioso y aburrido día normal.O eso creía él. La vida en la ciudad no deparaba sorpresas y no exigía demasiados retos, todo estaba servido en bandeja de plata, solo tenía que seguir el camino que le enseñaban.
-Daría lo que fuera por cambiar esta mierda de mundo...-Aquellas reveladoras palabras llegaron a odios malevolos.
El joven andaba por la calle sin pensar, ya había hecho el mismo camino muchas otras veces, pero ahora era distinto. Algo le acechaba. Se giró en rendondo e inspeccionó la calle. A las siete de la mañana no había nadie todavía, quizás algún que otro peatón. Al no ver anda sospechoso siguió adelante, pero de nuevo esa sensación de no estar solo le asaltó.
-Sal de donde estes, seas quien seas-Dijo autoritario y con la voz fría y cortante.
Una figura tenebrosa surgió de entre las tinieblas y miró la chico de arriba a abajo. Apenas parecía una oscura sombra.
-Chico, dices que quieres cambiar el mundo-Dijo el ser con una voz de ultratumba-..y que darías lo que fuera, ¿no es así?
Edward no se fiaba de lo que veía, ¿era real? No pasaba nada por seguirle la corriente al monstruo.
-Efectivamente, ¿qué eres?-La ciratura profirió un extraño ruido que supuso era su forma de reir.
-Soy un ente demoníaco, puedo ayudarte a conseguir tus mas ahneladas metas.
-¿Qué ganarías tu con eso?
-Verás chiquillo, soi un ser superior a los mortales, pero necesito vuestro aliento vital para permanecer completo, podemos hacer un trato, yo te daré algunos de mis oscuros poderes a cambio de una parte de tu vida. Puedes sacrificar la cantidad de vida que tu quieras, cuanta mas me des mas poderosos y numerosos serán los poderes que te concederé.
Edward se lo pensçó seriamente, aquello podía serle útil, y al fin tendría algo excitante que hacer.
-No pierdo nada, supongo.
-Bien, entonces... dime, ¿cuanta de tu vida me quieres dar? dilo en porcentaje.
-Un quince estaría bien, ¿no?
-Por ahora si sería suficiente-El demonio saco un pequeño cuchillo y se corto la palma de la mano, cogió la mano de Edward e hizo lo mismo-Cuando nos demos la manos el pacto quedará sellado, ¿estás seguro de esto?
-Si, hagámoslo.
El humano y el demonio estrecharon las manos con fiermeza.
-El traspaso de poderes, ya está hecho... vendré a verte en unos días...
De la espalda de la sombra surgieron dos tenebrosas alas, las agitó con fuerza y se fue volando...

El comienzo - Dia 1

Todo principio es difícil y no sabes nunca a donde te llevarán tus decisiones...
Desde hoy narraré las historias de hombres que siguen lo mejor que pueden su camino...  además de opiniones acerca de ciertos asuntos, musicales, mundiales, familiares e íntimos...

Vamos, que esto será mi puto tubo de escape.